La invasión de automóviles en la ciclovía es un problema que pone en riesgo la vida de las personas en bicicleta y que no se resolverá únicamente con la aplicación de infracciones, sino con infraestructura que confine el carril e impida el paso de carros, explicaron especialistas en movilidad y seguridad vial.
“La solución tiene que ser el confinamiento de la calle, hay una frase que dice ‘pintura no es infraestructura, o un confinamiento muy sencillo tampoco sirve de mucho. Hay elementos que podrían ayudar para que este espacio sea más ordenado y respetado”, señaló Francisco de Anda Orellana, especialista en seguridad vial, fundador y director de la asociación Movilidad y Desarrollo México.
La ciclovía de Saltillo tiene tramos que han desaparecido por el desgaste de la pintura, señalética y equipamiento urbano, los cuales diariamente son utilizados como estacionamiento o carril de circulación de automóviles.
La falta de condiciones de seguridad y la ausencia de elementos de la Policía de Tránsito que apliquen el reglamento desincentiva el paso de ciclistas por estas rutas, consideró el consultor en movilidad Parménides Canseco.
“Si la infraestructura está en mejores condiciones, puede ser un elemento para no estacionarse y aunque es muy difícil tener presencia 24/7 en todos, la policía debe estar estar ser visible”, apuntó.
De acuerdo con los expertos, evitar que los automóviles se estacionen o circulen por el carril para bicicletas no debe ser un asunto de cultura vial, consciencia, campañas de comunicación o castigo exclusivamente, sino de infraestructura y diseño de la vía.
“Hay que señalizar, poner bolardos, paredes de neopreno, lo que sea que dé seguridad al ciclista contra los automóviles, ese es el primer paso, el segundo paso sería las multas, ya cuando está señalizada la ciclovía”, indicó Héctor Cortés, coordinador de Junta de Honor del Colegio de Ingenieros Civiles de Saltillo.
A 11 años de haberse inaugurado la ciclovía en la capital de Coahuila, el municipio solamente ha registrado 2 mil 572 infracciones que sumaron un monto de 8 millones 106 mil 915.50 pesos por automóviles estacionados o circulando en el carril exclusivo para bicicletas; es decir, un promedio de 0.5 multas al día pese a que existen kilómetros invadidos y otros que desaparecieron por el desgaste de la pintura y señalética.